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Gizakiok famili, talde eta herri baten parte garen heinean, bizitzaren momenturen batean gure arbasoen eta etxekoen barri jakiteko interesa izan dogu. Nondik gatoz? Zein izan da gure ahaideen ogibidea? Zein izan da gure familiaren baserria? Horreen galderen erantzunak Elizaren Histori Artxiboan daukaguz.

“Saber lo que ocurrió a nuestros antepasados nos ayudará a comprender la situación presente” [Ideario. Fundación Casa Medina Sidonia]

Las claves para recuperar parte de nuestra historia familiar y lo que ocurrió con nuestros ascendientes pueden comenzar con la búsqueda del origen de nuestro linaje, nuestro apellido. Una de las fuentes de información imprescindible es el Archivo Eclesiástico, donde podremos remontarnos en nuestras búsquedas hasta el siglo XVI.

Archivo Eclesiástico Histórico de Bizkaia (AHEB-BEHA)

1563 es la fecha clave ya que fué en el Concilio de Trento donde se asentaron las bases, normas y la obligación de que todos los párrocos registraran e hicieran asientos de los bautismos, matrimonios y defunciones de sus feligreses. Caso excepcional es el de la iglesia de Santiago Apóstol en Ipiñaburu (Zeanuri-Bizkaia), dónde ya existía libro de registro sacramental desde el año 1501.

Así pues, en esos primeros asientos registrados tras el Concilio de Trento, encontraremos como bautizados, casados o finados a Pedro Martínez, Martín Pérez de Gopegui, María Goicoechea, Marina de Olaburueta de Suso, Pedro de Aranburu… Se trata de apellidos patronímicos (Pedro Martínez = Pedro hijo de Martín); apellidos patronímicos y toponímicos (Martín Pérez de Gopegui = Martín hijo de Pedro de la localidad de Gopegui ) y apellidos oicónimos, procedente del nombre del caserío (Maria Goicoechea).

El rastro de todos ellos se encuentra en los Archivos Eclesiásticos.

AHEB-BEHA. Libro 1 de finados. Zamudio 1592

En el caso de Bizkaia, el Archivo Histórico Eclesiástico (AHEB-BEHA) está ubicado en el antiguo seminario de Derio. Dicho archivo compatibiliza las funciones de recoger, conservar y difundir su fondo documental.

Su historia comenzó en el año 1972 con el inventario de la documentación existente en las parroquias que tenían documentación anterior a 1900. En 1976 Monseñor Añoveros decretó la creación del AHEB-BEHA respondiendo a la necesidad de recoger los fondos parroquiales diseminados por toda Bizkaia y ponerlos a disposición del público. Fue el inicio de las funciones de recoger, custodiar y conservar la documentación permanente de todos los organismos y entidades diocesanas (210 parroquias, documentos del Obispado, 16 centros educativos, Radio Popular y su archivo sonoro, Archivo de Historia Oral…).

Entre 1978-1980 se llevó a cabo la microfilmación de los fondos parroquiales. En 1997 se creó el Servicio Diocesano de Archivos y en el 2000 se inició el proceso de digitalización e indexación de los registros sacramentales, posibilitando el acceso en línea al catálogo en la base de datos y facilitando la consulta de más de dos millones de registros extractados de libros de bautismo, matrimonio y difuntos.

El AHEB-BEHA custodia documentos en seis depósitos que albergan 10.000 cajas de documentación (documentos de ayuntamientos, libros de fábrica, cuentas, visitas, censos, capellanías…) y un total de 2.300.883 registros de partidas sacramentales que abarcan un arco cronológico desde el siglo XII al XXI.

Año 1334. Carta de Alfonso XI. (Lekeitio)

En la web del archivo está disponible la indexación de documentos que datan hasta el año 1900. En la propia sala de consultas archivo, cuyo acceso es libre y gratuito, se puede consultar la imagen digital completa del registro. La sala de consultas dispone de 11 puestos con ordenadores y 2 aparatos de microfilm. Los documentos originales que no están digitalizados ni microfilmados, pueden ser consultados siempre que su estado de conservación sea el adecuado.

Entre los años 2008-2010 el equipo del Archivo da un paso más y pone en marcha el Centro Icaro, inaugurándose en el año 2010 el Centro Avanzado de Conocimiento de la Historia. “Atreverse a conocer” es su lema y para ello desarrollan numerosas actividades: talleres, cursos, seminarios, visitas guiadas y exposiciones. Cabe destacar el Aula de Archivo por tratarse de un proyecto educativo cuya idea es sensibilizar a las nuevas generaciones dándoles a conocer las funciones del archivo y el estudio del patrimonio documental, profundizando en los rasgos de la cultura vasca actual y su componente histórico. En su web recogen juegos interactivos para diversos niveles dando a conocer letras antiguas, pergaminos, fotografías y puzzles. El Centro Icaro reúne memoria y cultura e innovación y tradición.

Para llevar a cabo todo este trabajo el AHEB-BEHA cuenta con un equipo formado por: Anabella Barroso (directora), Cristina Castillo, Elena Cortázar y Ana Belén Sánchez. Todas ellas profesionales, creativas, atentas y cercanas al usuario.