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El día más corto del año, el comienzo del invierno, el solsticio, el comienzo de un año nuevo en el hemisferio sur. Diferentes culturas que en la sociedad latinoamericana y mundial se toman y se intentan mantener en la actualidad. En estas fechas, el Centro Vasco de Necochea es una de las instituciones que mantiene el espíritu cultural de su región: tradicionalmene se hacía una inmensa hoguera en el Boulevar de la Avenida 58, frente al edificio de Euzco Extea, y se quemaba el muñeco gigante de una bruja. Durante la última década se comenzaron a revisar ciertas cuestiones. 

Maite Bilbao forma parte del Centro Vasco desde niña. Fue bailarina dantzari, aprendió Euskera (el idioma del pueblo vasco, considerado el dialecto más antiguo de Europa). Actualmente es profesora de Esukera y de baile, y forma parte de la Comisión Directiva del Centro.

En comunicación con NdeN Maite explicó que el 23 de junio a la noche se festeja el San Juan, que es una fiesta pagana, mitológica, que se conmemoraba el solsticio de verano en el hemisferio norte, y en nuestro hemisferio sur el solsticio de invierno. 

"La tradicion en el Pais Vasco y en todo Europa es prender una hoguera en la víspera, el 23 a la noche, que representa el sol, es una hogera purificadora, se pide por buenos desesos, por un buen año y sobretodo por una buena cosecha en aquellas épocas y quemar todo lo malo... lo que ya queda atrás", contó Bilbao. 

Además explicó que la tradicion es saltar sobre el fuego "para que los deseos se cumplan", o tirar un papelito escrito con "lo que queres dejar atrás, un paquete de tabaco por ejemplo, para quien quiere dejar de fumar, o los apuntes de la escuela cuando terminan el año, etc". 

La recordada quema de la Sorgina y la revisión de las tradiciones

En Necochea históricamente en esta fecha el Centro Vasco organizaba, con anticipación, el armado de una inmensa "bruja", como personaje mitológico, con escoba, naríz puntiaguda, lunares, bonete y una sonrisa... y durante horas se la prendía fuego en la hoguera ante la mirada atónita de cientos de niños y familias sobre la Avenida 58, mientras el grupo de jóvenes bailarinas y bailarines danzaban alrededor del fuego. 

Según historiza Maite, al principio se hacía solo una hoguera, pero después se les ocurrió para hacerlo más atractivo, hacer lo de la bruja. "Eso se hizo por unos 25 años aproximadamente, fue una tradición muy exclusiva de Necochea", y agrega que en el País Vasco se hace solo una hoguera.

Sin embargo, algunos años después, las nuevas generaciones comenzaron a plantear una revisión de las tradiciones: "Así como podemos revisar las tradiciones de acá, el 25 de mayo, el 9 de julio etc...o cómo en algun momento la sociedad festejaba a Colón y luego nos preguntábamos si estaba bien".

Ejemplifica respecto a estas revisiones que se realizan en todo el mundo culturalmente, Maite cuenta que en el país vasco hay una tradición de un pueblo que en la playa, de costa a costa, ponían un cable largo y se colgaban del cuello de un ganso vivo, como una tirolesa, hasta que se quebraba el cuerpo del animal. "Luego eso se revisó, se empezó a hacer con un pato muerto directamente y luego con uno de plástico"... "Habrá gente que todavia no le guste que se haya cambiado la tradición pero bueno, hay que revisarla", concluye para volver al tema de la bruja. 

¿Qué es una bruja?

Así fue que en el Centro Vasco local se generó un proceso de debate y de análisis respecto a la bruja. "Vimos que en el País Vasco se hace un trabajo importante por la reivindicacion de la bruja.... Siempre se las creyó malas y hubo un momento de la historia, en la Inquisición, donde se quemaban brujas de verdad, se quemaban mujeres porque querian que no hablaran, no piensen, no estudien, no lean, se las tildaba de brujas y las quemaban... en realidad eran personas sabias que sabían utilizar unguentos, plantas, hierbas medicinales, sabían un poco más que otras y como no querían que se destacarán se las quemaban", historiza Maite Bilbao respecto a el proceso vivido a los inicios de la Edad Moderna en el 1500 denominado "caza de brujas". 

Respecto a esta revisión, agrega que "hasta Disney empezó a hacer una revisión de los cuentos, donde siempre la madrastra o la bruja era la mala... hoy en día quienes analizan las pedagogía, expican que en los cuentos hace falta que haya personajes buenos y malos pero no siempre tiene que ser la misma figura", explica la dantzari y agrega que "por esa razón quisimos dejar de quemar la bruja todos los años....aunque no descartamos que algún año podamos volver"

Por eso, durante los últimos años, cada San Juan se arma un personaje nuevo de la mitología: "Nos gustaría que no termine en la hoguera pero por ahora lo tenemos que hacer así y de a poco iremos a una simple hoguera, que se juegue con los deseos, el papelito y la magia del fuego", explica y reconoce que hay que hacer una transición, ya que en Necochea había un atractivo muy especial con los años de la Sorgina.

El Centro Vasco Necochea como institución y la diáspora

El Centro Vasco Argentino Euzko Etxea, fue fundado el 15 de Abril de 1945. Para Maite, la institución siempre tuvo un objetivo social: "Para quienes nos formamos ahi y para quienes se van acercando es nuestra casa, un lugar donde pasamos muchas horas, es una familia enorme... nos vieron nacer, crecer, y aprender a caminar ahi adentro... eso es la función mas importante que cumplen en nuestras vidas", relata y agrega: "Nos interesa ser una institucion formadora y que genere sentimiento de pertenencia, un lugar donde estar". 

Se conoce como diáspora vasca a la dispersión de los vascos que, por uno u otro motivo, dejaron su tierra para emigrar a otros lugares. La mayor población de origen vasco fuera de Europa se encuentra en América Latina. Por eso, este es otro objetivo primordial de la institución: Mantener la cultura vasca por fuera del país vasco.

Maite Bilbao también contó una interesante historia respecto a la dictadura de Francisco Franco en España, quien aplastó el gobierno democrático de "la Segunda República" en 1936 con un golpe de estado en el que además condujo el país hasta su muerte en 1975. En aquel golpe hubo 150 000 muertos víctimas de la represión estatal y un sinfin de exiliados y refugiados en todo el mundo. 

"Cuándo en el País Vasco estaban bajo la dictadura de Franco, prohibidos de cantidad de cosas, acá se manteía viva la cultura vasca incluso en Buenos Aires se imprimían los diarios para enviar alla y se mandaba ayuda". 

"Cualquier cultura es enriquecedera, dinamarquesa, italiana, vasca... somos un crisol de razas y todo suma", concluyó Maite y agregó que en el marco de la pandemia, este año, cada persona realizó una hoguera en casa: "Un fuego en el patio, o en la estufa y tiramos papelitos con deseos para enviarnos fotos y videos".