Efe, Madrid. Los vallecanos han elegido a Imaz entre un total de cinco candidatas, entre las que figuraban la maestra Ángela Rodríguez "Geli", la "señora Marcela", viuda de un republicano que creó una red solidaria en Vallecas, Herminia Azcoitia, vinculada al ayuda a personas vulnerables y la activista hondureña Berta Cáceres, asesinada en 2016.
6.396 personas han elegido a Imaz de las 12.356 personas que han participado en línea en el proceso participativo "Vallecas con nombre de mujer" y las 921 que han votado con papeleta en la Junta de Distrito y en urnas itinerantes.
Vasca de nacimiento, la religiosa, de la Compañía de María, llegó a Madrid en 1986, a la comunidad de la calle Luis Buñuel, en Vallecas, donde colaboró con las asociaciones vecinales y con su parroquia.
Según detalla el Ayuntamiento en un comunicado, realizó tareas de alfabetización de adultos y también de grupos específicos de mujeres, y colaboró en poner la primera piedra de lo que sería la asociación Barro ateniendo educativamente a un grupo de personas perceptoras del Ingreso Mínimo de Inserción (IMI), inicio de las labores de alfabetización para el colectivo de mujeres gitanas.
Vallecas informó ayer de este resultado en un evento celebrado en el Bulevar Peña Gorbea, en el que participó el concejal presidente del Distrito, Paco Pérez, que aseguró que "Vallecas necesita recuperar el nombre de mujeres en las calles" y se celebraron conciertos de las cantautoras La Mare, Eva Sierra y María Ruiz y una chocolatada.
Además, en la plaza que llevará el nombre de Amaya Imaz se ha descubierto un mural en aluminio del artista Fran de Gonari con una pintura collage en homenaje a las mujeres de Vallecas.
Una beasaindarra, entre las cinco candidatas para que una plaza de Vallecas lleve su nombre
Monja de la orden de la Compañía de María, estuvo estrechamente ligada a los movimientos sociales defendiendo los derechos de la mujer y en labores de alfabetización con las mujeres gitanasSe trata de Amaia Imaz, quien desde 1986 realizó una gran labor en el distrito madrileño.
Juantxo Unanua / Beasain. Si en su día el callejero de Madrid, por acuerdo de su corporación, bautizara una de sus calles con el nombre de Beasain, y la capital donostiarra diera el nombre de Dulce María Loinaz a un paseo, ahora el protagonista es el distrito de Vallecas de la capital madrileña.
Vive de lleno un proceso participativo en el que todos los vecinos de Puente de Vallecas elegirán la figura de una mujer «relevante» para la historia o que haya sido un referente para el distrito o barriada, que servirá para dar su nombre una plaza del distrito, situada entre la avenida de La Albufera, 78 y la calle Puerto del Monasterio.
Este proceso ha desembocado en una votación que está en marcha hasta el sábado, día 7, a las 19.00 horas. Los vallecanos deben elegir el nombre de una mujer entre las cinco féminas propuestas, todas ellas personas relevantes para sus comunidades, en esta caso la de Vallecas. Son mujeres que realizaron una gran labor en esa barriada, bien en torno a las primeras asociaciones vecinales, con actividades solidarias, o saliendo a la calle para reivindicar servicios públicos, llevando a cabo labores de alfabetización, etc.
El aita, de Segura
Entre las cinco candidatas está el nombre de la beasaindarra Amaia Imaz, gran mujer, monja perteneciente a la orden de la Compañía de María, que nació y vivió unos pocos años en la beasaindarra Avenida de Navarra, concretamente en la casa en cuyos bajos durante décadas estuvieron las oficinas de Correos.
DV contactaba con su hermana Concha, quien no oculta «su ilusión y alegría por la propuesta». Se reafirma en que su hermana Amaia «trabajó mucho y bien en esa barriada, fue mujer-monja adelantada a los tiempos». Concha no olvida sus orígenes en el Goierri, ya que está emparentada con los Elzo-Imaz de Beasain. «Nuestro aita era de Segura, de la familia Imaz. Emigró a Argentina con 14 años y al regreso a su Segura natal se casó» con Carmen Almandoz. La ama de Concha y Amaia era maestra. Corrían los tiempos de la República. «Era de Asturias, le destinaron a Segura como maestra. Además, en ese periodo y por unos poco meses fue la alcaldesa de señorial municipio, una de los cinco alcaldesas que hubo en España en esa época», recuerda Concha, sin olvidar ningún dato y con gran emoción.
Respecto a su hermana, subraya que dejó «plasmadas sus vivencias, su trabajo aquí y allá», en un libro. Amaia estuvo en Filipinas. «Eran los difíciles tiempos de Marcos e Imelda» dice Concha. «Puso en marcha un colegio en medio de muchas dificultades, trabajando mucho en otros campos. A los 10 años de haber dejado el país crearon una fundación que lleva su nombre, 'Lady Amaya'». En Londres dejó huella hace más de 40 años, cuando fue con 90 jóvenes. «Estuvieron de 'aupair ' y juntaba a todas los sábados y domingos para no perder el contacto».
Pero lo que se premia es su labor en Vallecasdesde 1986. «Trabajó en movimientos sociales y en defensa de los derechos de las mujeres, alfabetizando a muchos adultos y con grupos específicos de mujeres». Posteriormente, «colaboró estrechamente» con los Servicios Sociales de Puente de Vallecas. También realizando labores de alfabetización al colectivo de mujeres gitanas. Ahora toca esperar al sábado a que se desvele el nombre de la plaza. De entrada, se han emitido más de 11.000 votos y Amaia Imaz abre el listado con una diferencia de más de 700 votos sobe la segunda más votada.