Antxon Etxeberria. Jokin Miralles nació en Zarautz el 5 de agosto de 1944, pero con 14 años la familia se marchó a Durango (su ama era de Durango). Con 23 años se él se fue a las Américas a trabajar tras sacar previamente las oposiciones. «Estuve casi veinte años allí; primero en Brasil, con primera escala en Río de Janeiro. Allí conocimos al vicecanciller de Venezuela en Brasil y me fui a Venezuela, donde he pasado la mayor parte de los años, aunque viajando mucho. Tuve hasta cuatro empresas y cien operarios a mi cuenta, pero en un momento dado y debido a circunstancias y cambios que se atisbaban y porque no quería perder el dinero ahorrado, decidí volverme a casa. De eso ya han pasado muchos años. Desde 1982 vivimos en Deba». Guarda muy buenos recuerdos de su estancia en Sudamérica. «Incluso fundamos la Casa Vasca en la localidad venezolana de Valencia, Euskal Etxea, que todavía sigue en marcha con su frontón, piscina. Es donde se reúne la colonia vasca de allí».
Hoy en día jubilado, Jokin tiene como uno de sus hobbys la pintura. Otro de sus hobbys es salir al monte a por setas. «Cuando vine de las Américas apenas conocía estas tierras. Lo primero que hice cuando llegué fue coger el coche con mi mujer y recorrer gurdi bides (caminos de bueyes). Así he conocido mi hogar, aprovechando para pintar».
En esta muestra, que se podrá visitar en Kultur Etxea en horario de 11.00 a 13.00 y por las tardes de 17.00 a 20.00 horas, Miralles presenta su obra más reciente, con temática marina y mujeres. «Pinto varios cuadros de Orio, Zarautz, Getaria, Mutriku, Mundaka..., junto a retratos de personas , la gran mayoría mujeres, que he conocido, pero siempre desde mi perspectiva. Pinto lo que me gusta. A no ser que me encarguen algo concreto, siempre pinto lo que me apetece».
«Soy medio oriotarra»
Se siente muy agradecido por el trato recibido por el Ayuntamiento y en especial por Imanol Urkizu para poder organizar esta exposición en Orio. «Quieras que no, soy medio oriotarra; tengo familia aquí y me sentía en deuda con Orio. He traído lo que me ha salido de dentro, con mi mejor sentimiento hacia Orio. Espero que gusten los cuadros».
Sus pinturas se encuentran a la venta a precios, según dice, muy económicos. «Si se vende alguno mejor que mejor, por lo menos para cubrir gastos de pintura y lienzos, aunque como digo, no vivo de la pintura». Miralles dice que su padrino en el mundo de la pintura ha sido Ángel Uranga, presente también en la inauguración. El pintor zarauztarra define la obra de Miralles como una obra eminentemente guipuzcoana «con mucho empaste y muy bien compuesta».