Si bueno ha sido el resultado final, casi mejor ha sido la imagen que ha ofrecido durante la última jornada del torneo. Rahm no sólo acabó tercero sino que le disputó el título hasta los últimos hoyos de tú a tú a Dustin Johnson, Número 1 del mundo.
Jon llegó a colocarse líder en solitario a falta de tres hoyos. Un magnífico ataque sustentado en un eagle y dos birdies entre los hoyos 11 y 15 lo colocaron al mando del torneo. El jugador vasco ya estaba haciendo historia. Nadie ha sido capaz de ganar un Campeonato del Mundo en su primera presencia (salvo obviamente en la primera edición en 1999) y Jon se había fabricado la oportunidad con un golf valiente y poderoso.
Dos tripateos en los hoyos 16 y 17 frenaron en seco la acometida de Rahm y le dieron nuevamente el liderato a Dustin Johnson. El Número 1 ya no perdonaría. Acabó con un birdie y tres pares y se llevó el triunfo con un golpe de ventaja sobre Tommy Fleetwood y dos sobre Jon Rahm y Ross Fisher.
Esta tercera plaza supone el mejor resultado de un golfista vasco en la historia de los Campeonatos del Mundo. Rahm supera los dos quintos puestos logrados por José María Olazábal en los WGC Match Play de 1999 y 2002. Olazábal llegó a jugar 18 WGC con un balance de cuatro top ten. Visto lo visto no parece ninguna locura pensar que Rahm está llamado a batir esta cifra.
Por lo pronto, el próximo torneo de Jon va a ser precisamente otro campeonato del mundo. Va a jugar el WGC Match Play en Austin dentro de tres semanas. Entre torneo y torneo tiene previsto aprovechar el descanso para entrenar en alguna de las sedes de los majors en 2017. Esta misma semana tiene una cita con Augusta.