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Sara Utrera/Zumaia, Gipuzkoa. La actividad, dinamizada por la Red de Diversidad de Zumaia y promovida por SOS Racismo, ha reunido a familias de diferentes nacionalidades y culturas en 20 casas de Zumaia. Diez familias vascas, 9 familias extranjeras y un grupo de mujeres de la asociación de Mujeres Inmigrantes Malen Etxea, se reunieron el domingo en las inmediaciones de Torreberri para después dirigirse a los hogares, donde celebrarían la comida.

Cada reunión incluyó a una familia local, una inmigrante y un dinamizador, que ayudó en el encuentro de las familias. Los participantes del proyecto Biilagunak tuvieron la oportunidad de conocer y aprender más sobre sus diferentes culturas, como es el caso de los oriotarras Patricia Moran y José Ignacio Azkonobieta. La pareja recibió en casa de Patricia, en la calle San Telmo, a Marie Tourié y a su sobrino Insa Diabang de Guinea Conakri.

Para esta ocasión, Patricia cocinó pollo, ensalada y puré. «Estaba todo muy rico, nos lo hemos comido todo», comenta alegre Insa y añade: «me ha gusta ver qué se come aquí y cómo se cocina». Anfitriones e invitados también compartieron mesa con el dinamizador Iñaki Zubimendi, quien hizo de mediador entre las familias.

Deseo de integrarse

Marie Touré llegó a Zumaia hace seis años en busca de una vida mejor, tiene tres hijos: Aia y Adama de 18 y 12 años, a quienes trajo a Zumaia hace dos años y medio, y el pequeño Mikel de cuatro años, nacido en Zumaia. Aunque admite que ha vivido situaciones delicadas, para Touré ha sido muy fácil integrarse en el municipio. Trabaja en el restaurante Beheko Plaza, es miembro de la asociación africana de Zumaia, da clases de danza y participa activamente en las distintas actividades y proyectos socioculturales: «aquí me siento como en mi tierra, tengo muchos amigos e incluso participo en las actuaciones con los Joaldunak».

Insa por su parte, llegó a Zumaia hace casi tres meses tras haber vivido varios años en Zaragoza. El joven ha quedado encantado con la experiencia de compartir mesa con Patricia y José Ignacio, ya que «no suele ser fácil que alguien que no te conozca te invite a su casa. Somos muy cercanos y queremos integrarnos, así que estoy muy contento», comenta.

Los anfitriones y los invitados se conocieron por primera vez en el encuentro del domingo. Patricia reconoce haberse sentido muy a gusto con Marie Touré y su sobrino: «Ha sido una experiencia muy enriquecedora, una forma diferente para conocer su cultura y sus costumbres, su situación y su forma de vivir. Además, me gusta mucho relacionarme».

Durante la cita pudieron hablar de distintos temas como política o religión, y tras el postre, alargaron el encuentro con una sobremesa, donde siguieron charlando y conociéndose unos a otros.

Tanto la pareja formada por Patricia y José Igancio como Marie e Insa reconocen haber disfrutado de la inciativa Bizilagunak. «Ha sido una experiencia muy positiva e interesante», expresa José Ignacio Azkonobieta. Los participantes se intercambiaron sus números de teléfono para así seguir conociéndose mejor y repetir la experiencia. «Ahora les toca a ellos conocer nuestra comida», dice Touré.

«La idea era juntar a gente de distintas nacionalidades y culturas en un mismo espacio para que se conozcan y cambien experiencias, enriquece a todos», explica Iñaki Zubimendi, dinamizador el domingo de las dos familias. La cita Bizilagunak finalizará el 5 de diciembre, con la celebración de la VI edición de Gipuzkoa Solidaria en el Teatro Victoria Eugenia de Donostia, organizada por SOS Racismo Gipuzkoa.