Donostia-San Sebastian. La Universidad de Liverpool y el Instituto Vasco Etxepare han puesto en marcha este curso 2014-2015 la cátedra Manuel Irujo Fellowship, con el objetivo de impulsar el estudio de temas vascos. En este primer año los estudios se han centrado en la figura de Manuel Irujo Ollo, uno de los políticos más destacacados del exilio. Un recorrido que conoce perfectamente el profesor invitado Xabier Irujo Ametzaga, historiador del Center for Basque Studies (CBS) de la universidad de Reno y sobrino de Irujo.
Hemos hablado con él sobre el desarrollo de la cátedra y las actividades que llevarán a cabo en los próximos meses, empezando por el congreso “Manuel Irujo and 20th Century Basque Politics”, que tendrá lugar el próximo lunes.
-Has venido a Liverpool desde el CBS de Reno, como primer profesor invitado de la Cátedra Manuel Irujo Fellowship en Liverpool. ¿Cómo está siendo la experiencia?
Este tipo de experiencias son muy enriquecedoras, tanto para el que viene como profesor, como para los que reciben a esta persona. Sirve para crear nuevos proyectos, hacer frente a nuevos retos y contrastar nuevas ideas, al fin y al cabo, para aprender.
-¿Qué objetivo te has marcado en esta estancia? ¿Qué actividades has llevado a cabo?
Creo que será una estancia productiva y que fortalecerá los lazos entre el CBS y la Universidad de Liverpool. Ese es uno de lo beneficios más notables, el extender la red de investigadores de temas vascos en la Diáspora. En el plazo de poco más de un mes, Gorka Mercero (profesor de euskera en la Universidad de Liverpool) y yo hemos organizado un seminario de dos días, seis charlas, y un curso con vista a los próximos meses. Además, en marzo participaré en otras conferencias, en la London School of Economics y en Manchester, por ejemplo.
-¿Cuál es la valoración de la estancia hasta el momento?
Como digo, tenemos la agenda repleta y proyectos ambiciosos. Estamos todos muy satisfechos. El primer acto de mi estancia fue una charla anual, la Manuel Irujo Annual Lecture, el 10 de febrero. Hablé sobre el bombardeo de Gernika, y la charla se extendió durante dos horas, con la presentación y el coloquio posterior. Participaron medio centenar de personas, y incluso hubo asistentes que vinieron desde Londres.
-Para marzo teneis varias actividades previstas. ¿Cuáles son?
Lo próximo será participar en una conferencia organizada por The International Brigade Memorial Trust en Manchester. Allí hablaré sobre el bombardeo de Gernika, invitado por los historiadores Paul Preston y Dolores Long. Además, y de la mano de Preston, daré una charla sobre Gernika en la London School of Economics el 19 de marzo.
En Liverpool, hemos organizado dos seminarios internacionales. El primero se titula "Manuel Irujo and 20th Century Basque Politics" y cuenta con el apoyo de la UPV/EHU. Será este 9 de marzo (programa aquí). Entre los ponentes están Arantzazu Ametzaga, Aritz Ipiña, Aurora Madaula, Aritz Onaindia e Irati Agirreazkuenaga.
El segundo seminario se titula “An End to the Basque Conflict?” (¿Un final para el conflicto vasco?) y tratará sobre la construcción institucional y política de Euskal Herria, esto es, sobre la construcción de una república vasca de la mano del derecho de autodeterminación y haciendo frente al conflicto político, social, económico y cultural. Entre los ponentes estarán Iñigo Urrutia, Richard Gillespie, Amaia Agirre y Juan Jose Ibarretxe. El seminario ha sido organizado con la colaboración del Agirre Lehendakaria Center.
-Supongo que el seminario sobre Irujo será importante para la familia. Pero desde el punto de vista del historiador, ¿qué aporta la figura de Irujo a la politíca vasca actual?
Al igual que los pueblos, las familias también tienen que guardar su legado, de generación en generación, y seguir adelante. Los Irujo y los Ametzaga han vivido en el exilio durante cinco generaciones y yo soy hijo de esa quinta generación [Irujo nació en Caracas, Venezuela]. Si hoy Manuel Irujo viera que en la Universidad de Liverpool se enseña euskera, diría que el exilio que sufrió su generación y la resistencia desde dentro de Euskal Herria han dado su fruto. Y --añadiría- "todavía nos queda mucho por hacer".
Manuel Irujo defendió la independencia de Euskal Herria ante Churchill, en Londres, en el verano de 1940, e incluso logró de la administración británica un acuerdo escrito para la creación de la república vasca. Quienes queremos vivir en Europa como vascos, junto con los españoles, los franceses, los catalanes y los escoceses, tenemos mucho trabajo por hacer en todos los ámbitos. Pienso que deberíamos retomar el hilo de Irujo en aquel Londres bombardeado, para desarrollar y construir en Europa una república vasca.