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Donibane Garazi, Baja Navarra. El pasado sábado, 1 de julio, se iniciaba en Maule la edición de 2023 de EuskarAbentura, la iniciativa en euskera que lleva a jóvenes vascos de entre 15 y 17 años a recorrer durante un mes a pie toda Euskal Herria. Se trata de su quinta edición, este año con dos jóvenes de la diáspora participantes, Haize Suay i Sanginés, de València, y Unai Hernández-Minaberry de Tandil (Argentina). Conforman la expedición 125 jóvenes, que comenzaron su andadura en Maule, Zuberoa y la concluirán el 31 de julio en Getxo, Bizkaia, visitando un total de 32 localidades y conociendo de primera mano el país, su patrimonio cultural, histórico y natural promoviendo un modo de vida saludable y en consonancia con la naturaleza.

Ayer estaban en Donibane Garazi (video del programa local) para partir hoy hacia Iruña-Pamplona, seguir más tarde recorriendo Navarra y entrar seguidamente en Araba. Comienzan cada día caminando unos 15 o 20 kilómetros, llegando a destino sobre el mediodía. Y por la tarde llevan a cabo alguna actividad en el lugar donde estén, que puede ser una visita guiada, un encuentro con algún historiador, deportista o persona de la cultura de ese lugar, que les presenta algún tema local. 

Foto del grupo de 125 jóvenes, más monitores y ayudantes que compone EuskarAbentura 2023

Actividad de cómo organizar eventos desarrollada ayer en Donibane Garazi

Los jóvenes recorrerán más de 400 kilómetros entre el 1 y el 31 de julio

En conversación escrita con EuskalKultura.eus, Haize Suay i Sanginés, que forma parte de la comunidad y Euskal Etxea de València, explica que se apuntó en EuskarAbentura para hacer nuevos amigos, hacer deporte, conocer mejor Euskal Herria y mejorar su euskera. Si bien los primeros días no han resultado fáciles para ella por estar lejos de casa, subraya que la gente ha sido muy maja y le ha ayudado mucho. Conforme avancen los días espera abrirse más a gente nueva y está segura de que esta experiencia le cambiará la vida.

Por su parte, Unai Hernández-Minaberry coincide en destacar la amabilidad de tanto participantes como organizadores y monitores, y cuenta que está disfrutando mucho de la expedición. "Los recorridos son exigentes pero se pueden hacer y disfrutar", comenta. Su objetivo es, además de hacer amigos y recorrer Euskal Herria, mejorar sustancialmente su euskera. Él comenzó a estudiando en la Euskal Etxea Gure Etxea de Tandil y luego continuó por su cuenta. En los pocos días que lleva en EuskarAbentura ya nota cómo va avanzando en la comprensión, sobre todo de los euskalkis. Guarda ya en la retina momentos inolvidables como el de caminar por Donibane Garazi —su familia es de la cercana Ortzaize— mientras algunos jóvenes tocaban el pandero y la trikitixa y otros bailaban.