Donostia-San Sebastián. El investigador bilbaíno Pedro J. Oiarzabal inicia con el título genérico de Diaspora Bizia una colaboración periódica en EuskalKultura.eus. A partir de hoy, y cada tres o cuatro semanas este profesor experto en diáspora vasca publicará sus reflexiones sobre en nuestra sección de blogs. Su columna de hoy, titulada "La diáspora vasca en standby", analiza y comenta cómo afecta la pandemia que estamos sufriendo a nuestra diáspora. Sacar a colación y plantear temas relacionados con nuestra diáspora es precisamente uno de los propósitos fundacionales de EuskalKultura.eus, dando voz a diferentes opiniones y sensibilidades.
Preguntamos a Pedro Oiarzabal por los planteamientos de su colaboración.
"Diaspora Bizia al igual que en su primera etapa de 2015 tiene por objetivo reflexionar sobre la compleja realidad social de la presencia vasca más allá de las fronteras territoriales de Euskal Herria, con especial énfasis en su componente más social y que se encuentra articulado, principalmente, por una red de asociaciones de origen migrante o euskal etxeak. Y reivindicar su papel activo en la construcción de una ciudadanía vasca transnacional y que apenas tiene reflejo en las agendas públicas de las administraciones vasca y navarra. Todos somos necesarios si queremos construir un país más justo e igualitario".
¿Cómo ves ahora mismo el mundo de la diáspora vasca?
"Si entendemos la diáspora vasca como una gran red de redes, que van desde las mencionadas euskal etxeak a los centros de deslocalización de la producción de grandes empresas vascas, el panorama es de una gran complejidad y su análisis es extremadamente complicado. De ahí la necesidad urgente de profundizar en su conocimiento, sin el cual no puede existir un buen diagnóstico de la situación real para proponer medidas ajustadas a las necesidades. Por ejemplo, tenemos nodos en la red de euskal etxeak, tanto de la diáspora tradicional como más actual que apenas existen más allá de sus estatutos de constitución, mientras otras rebosan de gran vitalidad y de un relevo generacional encomiable. En cambio, no se llega a entender el descuido público a los más débiles en favor de los más fuertes, cuando todos forman parte de una misma red que subsiste en la medida que sus nodos subsisten".
Recordemos que Pedro J. Oiarzabal es doctor en Ciencias Políticas-Estudios Vascos por la Universidad de Nevada, Reno (EEUU). Desde hace dos décadas su trabajo se ha centrado en la investigación y consultoría sobre políticas públicas (ciudadanía en el exterior y retorno), diásporas y nuevas tecnologías, y memoria social e histórica (historia oral, migración y exilio), con especial énfasis en el caso vasco. En los últimos tiempos están logrando una especial repercusión sus trabajos sobre el papel de los vasco-norteamericanos en la Segunda Guerra Mundial, sin olvidar su labor especializada en historia oral vasca en EEUU. Su Twitter, @Oiarzabal.
Agradecemos que nos haya escogido para plantear algunas de sus reflexiones y comentarios sobre el mundo de la diáspora.
El post "La diáspora vasca en standby" se halla localizado en nuestra sección de blogs, en la parte baja de nuestra portada. Cada colaborador/a elige la lengua en que publica sus posts.