Joseba Etxarri. Se graduó en Ciencias Políticas en la Universidad de California en Berkeley, pero su vida profesional se ha decantado más bien hacia el periodismo y la docencia. Si no directamente su nombre, a muchos les suena el libro que sobre las comunidades vascas de Estados Unidos escribió en forma de guía bajo el título "Travel Guide to Basque America" (University of Nevada Press, 1998), todo un best seller y uno de los más vendidos de entre los que ha publicado Reno. Nacida en San Francisco, Nancy Zubiri reside en Los Angeles, desde donde se ha desplazado para participar junto a otros muchos miles de vascos en el Jaialdi 2015.
Ejerces de periodista y escritora, en particular sobre tema vasco. Tu libro Travel Guide to Basque America está presente en muchos hogares vascos de Estados Unidos. Es un libro de casi 600 páginas que se convirtió en best seller.
-Yo estaba muy involucrada en la comunidad vasca y trabajar para el libro me permitió combinar el amor por mi cultura con mi faceta periodística. Es una obra que recopila la historia de los vascos en Estados Unidos. Me llevó tres años de documentación, entrevistas e investigación y otros tres de redacción y edición del texto. Su primera edición logró un éxito importante hasta convertirse en best seller y en 2006 publiqué una segunda edición corregida, aumentada y actualizada. Hoy día sigue vendiéndose y conserva en su parte histórica buena parte de su vigencia.
También eres docente.
-Ya en la época de la elaboración del libro trabajaba como voluntaria de maestra en Venice (junto a Los Angeles). Decidí que quería trabajar como maestra de secundaria y así lo hice. Me saqué las credenciales que necesitaba y hoy es el día en que sigo impartiendo clase en un instituto, el Venice High School, enseñando inglés y periodismo a jóvenes de entre 14 y 18 años.
Y diriges la publicación vasca online Euskal Kazeta.
-Euskal Kazeta es un sitio web de noticias y sobre todo lo que tiene que ver e interesa a los vascos de este país, en inglés. La creé hace seis años y crece muy poco a poco, porque lo elaboro en mi tiempo libre. Me ayuda, cuando puede , mi marido, que también es periodista y cuento con otras personas que colaboran ocasionalmente, ninguna de modo regular. Me gustaría dedicarle más tiempo, pero como digo la hago en mis ratos libres. Creo que la gente vasca de Estados Unidos desea saber de su cultura, se sienten orgullosos de ella y aunque a veces no participen de manera activa, eso no significa que no les interese. Es por eso que pienso que debemos saber cómo llegar a ellos y creo que mi sitio web les ofrece una manera de saber y participar desde sus casas a través de la red.
Lo virtual va sustituyendo a lo físico.
-Una de las dificultades ante las que se encuentra la comunidad vasca es que se ha dispersado geográficamente. Ya no es tan fácil que la gente se reúna y se vea a menudo y hace no tantos años las comunidades vascas vivían en cada lugar casi como una pìña, se veían y reunían habitualmente. Hoy día las reuniones físicas, la cantidad de eventos ha bajado, hay muchos menos encuentros de los que había antes, pero estos son más grandes, con festivales como por ejemplo los de Bakersfield, el de febrero del Basque Cultural Center de San Francisco o el propio Jaialdi.
Has hecho alrededor de 1400 kilómetros para estar esta semana aquí.
-Desde su primera edición en 1987 solo he faltado una vez. Me encanta Jaialdi. Creo que es una gran fiesta que te permite encontrarte con amigos que de otro modo no ves. Constituye un hermoso modo de celebrar nuestra cultura y de mostrársela al mismo tiempo al resto del mundo. Realiza un trabajo increíble. En Jaialdi el abanico vasco se abre y entran muchos americanos no vascos, atraídos por lo vasco y teniendo por tanto una referencia y un conocimiento mayor o menor sobre nosotros.
¿Ha cambiado mucho Jaialdi?
-Ha crecido mucho. Participan tanto vascos locales como americanos no vascos, también gente del resto del país y del País Vasco e incluso de otros países de la Diáspora; sé por ejemplo que esta semana ha venido gente de Argentina y de Australia, incluso de Japón. Boise ha logrado juntar y desarrollar una comunidad en la que no les importa trabajar duro, son creativos y no se amilanan ante los retos. Así se explican iniciativas como traer aquí hace unas semanas al Athletic de Bilbao o la propia organización de Jaialdi.