euskalkultura.eus

“El cine es más que mero entretenimiento, es una vía para dar a conocer nuestra realidad como país y nuestra contribución cultural”, explica a EuskalKultura.com Philippe Acheritogaray, responsable del proyecto. La filmoteca, una continuación del programa de cine de la entidad Basque Educational Organization, con base en San Francisco, ofrece más de veinte títulos en versión original y subtítulos en inglés, entre documentales, dramas y comedias.

San Francisco, EEUU. En 2004, el Basque Educational Organization inició un programa de cine por medio del cual programaba en San Francisco la exhibición y forum de tres y cuatro filmes al año, en una iniciativa abierto a todo público. Ahora, NABO ha decidido hacer el archivo accesible al resto de entidades vascas.

La filmoteca cuenta hasta el momento con 24 cintas que pueden ser fácilmente recibidas en el buzón, enviando una solicitud a filmategi@nabasque.org. “Solo tienes que ojear el catálogo, elegir una película que te guste, programarla en tu centro y te la enviaremos sin costo alguno”. No hay, además, un límite de tiempo a la hora de devolverla, si bien al de cuatro semanas se envía un aviso al correo electrónico para realizar un seguimiento de su exhibición, “porque la idea es sacarle chispas a la iniciativa y asegurarnos su difusión”.

“Mucha gente no sabe ni que estas películas existen, y son muy buenas”, asegura Acheritogaray. El responsable del proyecto está convencido de la bondad de la iniciativa, que incluye cortometrajes, algunos nominados a los Oscar, como es el caso de 7:35 de la mañana, de Nacho Vigalondo, o de Éramos pocos, de Borja Cobeaga.

“El cine es más que mero entretenimiento, es una vía para conocer nuestro realidad como país y nuestra contribución cultural. Además sirve para conocer cómo se quieren retratar los vascos y cómo el euskera, además de ser una de las lenguas más antiguas de Europa, está en constante uso y evolución”, refiere.,

Hasta la fecha, NABO ha enviado una veintena de películas a 13 solicitantes de California, Oregon, Nevada, Idaho y Massachusetts. Acheritogaray se muestra satisfecho y asegura que “está funcionando bastante bien”. Añade asimismo que el programa no está limitado a los Estados Unidos, sino que también se puede participar desde los otros dos países norteamericanos, Canadá y México.