Nueva York, EEUU. Ha pasado una década desde la inauguración en la CUNY de la Cátedra Bernado Atxaga. La profesora donostiarra nos explica los detalles del seminario que emprenderá en la City University of New York (CUNY).
Esta pionera cátedra se creó en 2011 cuando usted era directora para la promoción y difusión del euskera del Instituto Vasco Etxepare. ¿Cuál es su objetivo?
Promover el estudio, conocimiento e investigación de la lengua y literatura vasca. Ofrece anualmente un programa académico de doctorado impartido por profesores invitados destacados en la materia que van a Nueva York. Entre otros temas se abordan diversos aspectos de la literatura vasca, historia del cine vasco, sociolingüística, etc.
¿Cómo recuerda el acto de inauguración de la cátedra?
Recuerdo que fue el propio Atxaga quien, en septiembre de ese mismo año, inauguró la cátedra en el Graduate Center de la CUNY. Organizamos un acto muy bonito, con el músico Jabi Muguruza y la traductora Miren Gabantxo.
Este año será la profesora invitada. ¿Cuál es el perfil de su alumnado? ¿Y la dinámica de las clases?
Será un seminario de una semana, con dos horas lectivas cada día. Y el alumnado estará compuesto por unos diez doctorandos del ámbito de la Lingüística, Literatura y Estudios Culturales. Lo cierto es que el alumnado de la CUNY suele mostrar gran interés y seriedad, y creo que este año también tendré un buen número de aficionados a la literatura, y “atxagazales”. Será un verdadero placer interactuar con ellas y ellos.
Por tanto, saben que Atxaga dio un tremendo impulso a la literatura vasca…
Desde luego, y por eso, además de ubicar su obra en el contexto de la literatura vasca, también lo haré a nivel global. A su vez observaremos la acogida que han tenido sus trabajos, lo que supone escribir en una lengua minorizada, etc. A continuación nos detendremos en los diferentes temas, conceptos, motivos y poética que tejen el universo de Atxaga, dando pie a la lectura de fragmentos de sus textos.
¿Y en qué novelas se centrarán?
Sin olvidar la importancia que han tenido la poesía, el teatro y la literatura infantil y juvenil en la prolífica obra de Atxaga, la primera de nuestras metas será el libro de cuentos Obabakoak. Nos adentraremos en la geografía de Obaba, en la poética y forma de ver el mundo en las historias que allí suceden, además de subrayar la importancia que tiene la metaliteratura en dicho libro. Después nos centraremos en El hijo del acordeonista, como ejemplo del paso que dio Atxaga en los 90 hacia las novelas que giran en torno a la memoria histórica. Hablaremos sobre la importancia que tiene la utopía, y acerca de las razones que da la novela sobre los porqués del conflicto vasco. Y para completar el curso, nos centraremos en las dos últimas novelas de Atxaga, en las que da un giro hacia la autobiografía, más concretamente en Días de Nevada. La pondremos en conversación con novelas que se convirtieron en excelentes narraciones de la emigración vasca como Sweet Promised Land, de Robert Laxalt.
En el curso también abordarán las adaptaciones cinematográficas de sus novelas…
Eso es, veremos algunos fragmentos de películas como Obaba o El hijo del acordeonista, y abordaremos la visión a las que se prestan.
En ese sentido, ¿diría que Atxaga es un escritor visual?
No sé exactamente a lo que te refieres, porque la literatura y el cine tienen códigos muy distintos. De una gran obra literaria se puede realizar una adaptación muy mala al cine, pero al revés también. Tenemos muchos ejemplos. En nuestro caso, creo que las películas Obaba y El hijo del acordeonista, y también Aizpea Goenaga con Zeru horiek, acertaron en trasladar a las imágenes la atmósfera y conflictos de esas obras de Atxaga.
De hecho un ritmo narrativo rápido no te garantiza que la adaptación cinematográfica vaya a ser mejor…
Desde luego que no, y tampoco el que contenga muchas escenas. Porque al final adaptar es crear. Pongamos como ejemplo la adaptación del cuento de Esteban Werfell en la película Obaba. En ese relato la memoria es la clave, y Montxo Armendariz supo adaptar bien la atmósfera de misterio del libro.
¿Cómo resumiría la literatura de Atxaga en una frase?
Con esa pregunta me siento como si tuviera que meter todo un océano en un vaso (risas). Pero te diría que en el universo de Atxaga confluyen la actualidad y el poder de atracción, en un camino hacia la búsqueda constante. Y en ese camino Atxaga ha establecido un diálogo con creadores de diferentes disciplinas (músicos, cineastas, pintores,...) para interpretar con nuevos ojos la vida de la que se nutre precisamente la literatura.