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Orio, Gipuzkoa. Por su nombre podría parecer un zarauztarra o un oriotarra más, pero cuando habla su castellano denota a la legua que el joven Iker Irazusta es argentino. Iker forma parte de una familia muy conocida entre los vascos de Argentina: su tio Mikel Irazusta es hoy presidente del centro vasco Unión Vasca de Bahía Blanca, como lo fue antes su abuelo Andoni, un referente de la comunidad vasca local. Se trata de una amplia familia, presente en diferentes ciudades y localidades argentinas, que ha contribuido de forma importante al mantenimiento y desarrollo de lo vasco en el país sudamericano.

Precisamente, en honor a su abuelo, Iker ha bautizado su nuevo emprendimiento en Orio como Gure Aitona (Nuestro abuelo). Este restaurante a pie de playa viene a sumarse al anterior negocio en el que ha participado el joven, el chiringuito Borghetto, en pleno Malecón de Zarautz. Borghetto se ha convertido en un punto de encuentro para muchos vascos argentinos, que acuden al local para disfrutar de productos de allá: cerveza Quilmes, o una bebida típica argentina como el 'ferné'.

En tres días

Irazusta asegura haberse integrado muy bien en Zarautz, adonde llegó hace cuatro años vía Gales. "Salí de Argentina a Gales por trabajo, y como tenía familia de aquí, una vez de venir a Europa decidí conocer el País Vasco", explica. "Bajé a Zarautz, y en solo tres días decidí quedarme. Me gustó mucho el paisaje y también la gente".

[El vasco-argentino Iker Irazusta, tras la barra (foto IIrazusta)]

Durante un par de años trabajó en el negocio del chiringuito durante el verano, mientras que en invierno regresaba a la Argentina, pero este año se ha radicado definitivamente en Euskal Herria, donde se encuentra "como en casa". "Allá en Argentina, la casa de mi familia está diseñada como un caserío de acá. Por dentro también es igual, y además está lleno de fotos, ikurriñas... Mi familia lleva toda la vida hablando de Euskal Herria, y entre otros familiares una tía mía estuvo viviendo aquí durante cuatro años, por lo que teníamos mucha información", cuenta.

Al contrario que algunos descendientes, que en su retorno al País Vasco afirman haberse encontrado con indiferencia por parte de la sociedad, Irazusta asegura que su acogida en Zarauz ha sido inmejorable. "Se me han abierto todas las puertas, y tengo que dar la gracias especialmente a la familia Arrillaga, que me ha ayudado mucho", asevera.

-Más información en la página web de Facebook del chiringuito Borghetto