Seattle Euskal Etxea es el centro vasco más al noroeste de la geografía estadounidense, a unos 250 kilómetros de distancia de Vancouver (Canadá), sedel de la euskal etxea hermana de British Columbia, ya en el lado canadiense. El pasado 12 de septiembre, Lake Sammamish acogió el picnic y fiesta anual del Seattle Basque Club: “Fue un encuentro muy agradable y familiar, al que a compañó el buen tiempo”, explica a EuskalKultura.com Fran Michelena, presidente de la entidad.
Seattle, EE.UU. Rotunda Shelter, en Lake Sammamish, fue el lugar de encuentro para algo más de medio centenar de socios y amigos del Seattle Euskal Etxea que se juntaron el sábado para celebrar su picnic anual de verano. “Fue una comida muy agradable, para toda la familia; además hizo buen tiempo”, indica Michelena a este boletín. "Y comentar el tiempo no es algo trivial en estos lares, ya que el año pasado la comida fue pasada por agua", añade.
Chorizo, cordero a la barbacoa, mus… los asistentes disfrutaron de buenos ingredientes y aditamentos, aunque según subraya el presidente del club, lo más importante fue poder encontrarse con gente que no pueden ver tan a menudo. “La mayoría de los socios vivimos en las inmediaciones de Seattle, pero casi la mitad viven en Yakima”, a unas dos horas y media en coche, explica.
Renombrar el Club
Desde que el Club ingresó en NABO en 1997, las directivas han completado una “larga lista” de socios aunque, en la actualidad, son unos 80 los miembros activos, y viven casi simétricamente divididos entre Seattle y Yakima. De hecho hubo un momento en que el estado contó con dos clubes, nucleados en torno a ambas ciudades, que más tarde devendrían en la actual euskal etxea. “Por eso hace dos años pensamos en cambiar el nombre por el de Washington Euskal Etxea, pero al final no lo hicimos; supongo que por no confundir a la gente con (el centro de Washington) DC”.
Clases de euskera a falta de profesor/a
Los vascos de Seattle estarían encantados de retomar las clases de euskera, algo que NABO también está animando a hacer a las euskal etxeas, “pero no es fácil encontrar en Seattle a una profesora o profesor adecuado que hable batua”, explica el presidente. A pesar de ser un club pequeño, al año organizan dos festejos principales: la comida de primavera y la de verano. Y junto a estas, también suelen preparar clases de cocina, "que suelen ser entretenidas y exitosas”. “En la última nos a dentramos en el arte de preparar una buena paella y, aunque no lo hayamos concretado aún, estamos pensando organizar otra para aprender a elaborar chorizo”.
Michelena, antiguo tesorero del Club, ocupa ahora la presidencia. Junto a él conforman la Directiva del centro Martin Parish (vice-presidente), Gaizka Mallea (tesorero), Marilou Michelena (directora) y Constance Uribe (directora).