La pastoral Katalina de Erauso, sobre la monja aventurera, pide el apoyo de las euskal etxeak
24/02/2016
Catalina de Erauso, la donostiarra que huyó del convento con 15 años y vivió una vida de aventuras y batallas en América disfrazada de hombre
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Un grupo de músicos, dantzaris y actores no profesionales de Iparralde trabaja en la preparación de una pastoral sobre Catalina de Erauso, la mítica monja que allá por el siglo XVII huyó a América disfrazada de hombre y vivió una vida de aventuras y batallas. La pastoral se estrenará en junio en Baiona y podrá verse después en Donostia. Los organizadores han lanzado una campaña buscando apoyos y financiación, a la que ya se han apuntado las euskal etxeak de París, Suiza y Pau.
Baiona, Lapurdi. Desde febrero de 2014, la asociación Katalina Pastorala Elkartea trabaja dando forma a una pastoral basada en la apasionante vida de la conocida como Monja Alferez. Nacida en Donostia, Catalina de Erauso fue internada a los cuatro años con sus tres hermanas en el convento de las dominicanas de su ciudad natal, ubicado en el actual Palacio de Miramar. A los quince años huyó del convento y para protegerse se vistió de hombre.
En 1600 atravesó el Océano hacia el Nuevo Mundo, donde alternó los cargos de navegante, tratante y militar. Hábil con la espada, no obstante, fue herida gravemente en un altercado, quedando al descubierto su condición femenina. Se volvió famosa, y tras dos años de reclusión forzosa en un convento, la repatriaron a España. Obtuvo reconocimiento y una renta de Felipe IV. El Papa Urbano VIII le autorizó la vestimenta masculina. No pudiendo soportar las miradas ajenas se volvió a México, donde terminó su vida como hospedero y arriero.
En Baiona y en Donostia
La pastoral se estrenará el 5 de junio en Baiona, y después, en septiembre, llegará también a Donostia, según explica a EuskalKultura.com Jean Michel Etchart, miembro de la organización. El proyecto, que contará con más de un centenar de actores, tendrá unas 20 escenas, acompañadas de 220 versos con música, canciones y bailes.
Para llevarlo a cabo la asociación cuenta ya con el respaldo del Gobierno Vasco y del Consejo de la Región de Aquitania, además del de patrocinadores locales. La mayor parte los actores, músicos y técnicos implicados son voluntarios. Aún así, se necesita recaudar los fondos necesarios para gastos técnicos como la sonorización y el alquiler de gradas y carpas, por lo que la organización ha lanzado una campaña en busca de apoyos entre los vascos del mundo, a la que ya se han sumado las euskal etxeak de París, Pau y Suiza.