diáspora y cultura vasca
22/07/2014
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Bridgeport, EE.UU. La razón por la que los vascos de New England han decidido adelantar el Arrantzale Eguna de este año es la proximidad de las fechas de agosto con el 6 de septiembre, día en que se juntarán para celebrar la comida anual de la Euskal Etxea.
Para el Día del Pescador el menú será sopa de pescado y paella; la primera preparada por Luis Azpiri, padre de la delegada, y la segunda por Francisco Martija, José Ramón Aja y Juan Urkidi. “El Dolphin’s Cove es un restaurante portugués y (el dueño) nos conoce desde hace tiempo, por eso nosotros cocinaremos lo nuestro y no tendremos que pagar nada”, en palabras de Naiara Azpiri, "excepto las bebidas, que sí que deberán ser abonadas en la barra".
El plan es juntarse a las 13:00 horas y que, mientras los cocineros preparan el menú, los asistentes disfruten de los aperitivos. Quienes quieran participar del encuentro deberán aportar 10 dólares y llevar algo para picar antes de la comida o un postre.
Los asistentes esperan contar con la presencia del músico Mikel Arambarri, nacido en Newport, de padre ondarrés y madre estadounidense. “Puede cantar canciones de Mikel Laboa o Boga-Boga, canciones que gustan a todos”. Y para que los asistentes puedan cantar con él, la euskal etxea piensa imprimir las letras de canciones más típicas, porque “algunos llevan aquí cuarenta años y ya no las recuerdan”. La comida terminará al anochecer.
El restaurante Dolphin’s Cove Marina está situado en la costa. “Estás muy cerca del agua –comenta Azpiri− y nos recuerda el ambiente de allí”, agrega recordando el estilo de festejo de Ondarroa. Hace años que los dueños del local y los vascos de la zona se conocen y, es que, era allí adonde iban a tomar algo al salir del frontón, hasta su clausura en el año 2002.
Fue en 1988 cuando Luis Azpiri organizó por primera vez el Arrantzale Eguna en New England. El pelotari llegado de Ondarroa preparó marmitako para la ocasión y no varió el menú de esta comida anual hasta 2002. Desde entonces y hasta el pasado año, los vascos de la zona no volvieron a juntarse para el Día de Pescador.
Desde que se cerró el Jai Alai “nos hemos juntado menos”, en palabras de Naiara Azpiri. Es por ello, y por recuperar la tradición iniciada por su padre, que el año pasado celebraron de nuevo el Arrantzale Eguna en el mismo restaurante. Asistieron 52 personas y este año esperan “quizás hasta 80”. La mayoría serán vascos nativos de Euskal Herria, aunque también se sumará algún que otro amigo estadounidense.
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