diáspora y cultura vasca
14/03/2012
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Por Pedro Oyanguren/Santiago de Chile. Las Cofradías de Arantzazu creadas en Perú, México y Chile se podrían considerar como las primeras instituciones creadas por vascos en América en los siglos XVI y XVII. La de Lima cumple este año sus cuatrocientos años. Estas nacieron seguramente como reminiscencia de la antigua tradición del auzolan, como instituciones de ayudas mutuas.
Solo a partir de fines del XIX y principios del XX comienzan a aparecer las primeras Euskaletxeak, coincidiendo con fuertes emigraciones hacia América. Si se revisan las publicaciones de la época son notorias las influencias nacionalistas que empujaron la creación de estas instituciones. En el caso de Chile, posterior a las de Uruguay y Argentina, la primera publicación de éste tipo corresponde al año 1907.
Solo en Marzo del 1912 aparece la escritura legal de la creación del primer Centro Vasco en Santiago de Chile. Desde entonces funcionó en diversos lugares de la ciudad pues no tenía un sitio en propiedad.
En 1931 se crea dentro del mismo Centro Vasco una agrupación de jóvenes con un mayor compromiso político nacionalista que se llamó Euzko Gastedija, que era la respuesta de lo que sucedía en esa época en Euzkadi. Recibieron en herencia de don Vicente Aranguren el año 1943, una propiedad en la calle Echeverría 1002 en Santiago.
Durante algunos años ambas instituciones siguieron funcionando en forma separada, pero no así en las tres fiestas institucionales que se celebraban en común: Aberri Eguna, Iñaki Deuna (San Ignacio) y Mikel Deuna (San Miguel).
Terminada la Guerra Civil y estando el Gobierno Vasco en el Exilio, se recibió la primera visita del Lehendakari Agirre en el año 1942. Con su llegada se iniciaron las gestiones para unificar ambas instituciones y finalmente logró Agirre la unión.
Euzko Gastedija vendió la sede que tenía y juntos compraron la propiedad actual en la calle Vicuña Mackenna. Transformaron el nombre y pasó a llamarse Euzko Etxea, donde se acoge a los vascos de los siete herrialdes. Se recorrió el país pidiendo ayuda a todos los vascos que estaban en condiciones de prestarla y se comenzó la construcción en 1957 y desde entonces no se ha parado, siempre hay algo más que construir o hacer. Esto es importante, pues siempre que exista la ilusión de un nuevo proyecto, es como un nuevo renacer.
Hola, mi nombre es Cristian Ignacio Moratinos Fernandez, Hijo de Miguel Moratinos Olaran, nieto de Olaga Olaran Rodriguez, Hija de Miguel Olaran Aranguren, mi padre me habia comentado que un tio de el al fallecer y no dejar nietos, quizo dejarle la herencia a mi abuela, pero mi abuelo alejandro moratinos mayor, de castilla y leon, no acepto y que el les habri dejado en herencia una propiedad y otros bienes al parecer, bueno nosotros somos familiares del tio vicente, veo por su pagina que esto es efectivo, a ver si nos uinvitan en alguna ocasion, vivimos en concepcion, pero por trabajo sopy arquitecto, recorro todo chile, muchas veces pase por afuera de la sede de vicuña mackenna pero no me cuadraba la historia del tio con la casa que veia, somos de cegama, guipuzcoa. slds y espero estemos en contacto.
Cristian Moratinos (San Pedro de la Paz), 10/08/2020 22:15
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