En abril, Neena Laxalt envío un email a 35 mujeres de Reno (Nevada, EE.UU.) para salir a cenar. Todas se apuntaron. Charlaron, disfrutaron de la comida y de las bebidas y pasaron un muy buen rato. La siguiente reunión la convocó Florence Larraneta Fraye, tomando el testigo de Laxalt, para el 21 de septiembre. Una vez más, el éxito fue absoluto: “Todas aparecieron, tuvimos casi problema de espacio”, ha indicado a EuskalKultura.com. La próxima cita será el 13 de diciembre, en el restaurante Louis Basque Corner de Reno y esperan juntarse 75 amigas. “Esto va creciendo, porque es importante para ellas”.
Reno, EE.UU. Fraye recuerda que una de estas mujeres fue, en 2010, al Jaialdi de Boise y que se sintió “como un pez fuera del agua”. Cree que muchas mujeres vasco-americanas sienten que les falta algo. “Muchas veces nos centramos en los políticos, o en los escritores, en gente importante, y nos olvidamos de la gente de a pie, que también es parte de la diáspora y les encanta hablar sobre ello”.
La organizadora explica que en las reuniones “estas mujeres están en su ambiente. Nadie tiene vergüenza de participar, cada una lleva su nombre, ya sea vasco o americano, escrito en el pecho y así es como todo se anima”. También habla de “reforzar lazos” porque, cuando salió de casa para ir a la universidad, su mundo euskaldun se desvaneció, de alguna manera: “Pierdes el contacto, dejas de escuchar el idioma, pero aún te sientes vasca. La mayoría de nosotras tiene una pequeña oveja corriendo por sus venas. Esa es nuestra historia”.
Fraye quiere dejar claro que estos encuentros son completamente abiertos, “si te gustan los temas vascos, deberías venir”, dice. Y agrega lo que un amigo le suele decir: “Si te sientes vasca, si quieres ser vasca, eres vasca”.
Mujeres de todas las edades acuden a estas citas. De hecho, hace unos días Fraye tomó los datos a cinco mujeres que ya han superado los ochenta años pero que quieren participar. Son de Boise (Idaho). También hay alguna que llega desde Arizona y la gran mayoría se acerca desde otras ciudades. “Deberíamos juntarnos las mujeres de California, Idaho, Nevada, de los estados del oeste”, opina. Pero también reconoce que para que esto siga adelante tiene que seguir siendo algo simple: “Sé que seguirá creciendo siempre que no se convierta en algo complicado”.
Al último encuentro acudió Lisa Corcostegui, quien explicó a las presentes el trabajo que realiza en la página web The Basque Branch, portal que creó para ayudar a la gente a hacer sus árboles genealógicos. Y para la siguiente cita, dos estudiantes del Centro de Estudios Vascos de Reno harán una presentación sobre Olentzero, el Papa Noel de Euskal Herria. Fraye también está pensando en darle un nombre al grupo, “algo en euskera, que suene mejor que ‘Basque ladies’”, indica con gracia. El encuentro será el día 13 de diciembre en el restaurante Louis Basque Corner, de Reno. Cerca de 50 mujeres ya han confirmado su asistencia. Aún hay espacio para otras 25, aunque viendo los antecedentes es predecible que los asientos no aguanten libres mucho tiempo.
Si estás interesada en atender o tienes alguna pregunta, escribe directamente a Florence Larraneta Fraye a nevadalovestory@gmail.com.