Bakersfield, EEUU. Se trata de una mala noticia, precedente de otras que seguramente nos llegarán en diversos órdenes de la mano de la actual crisis pandémica. El hotel Noriega de Bakersfield, el más antiguo de los establecimientos vascos históricos que funcionaba en Estados Unidos, ha anunciado que no volverá a abrir sus puertas tras el cierre por la Covid-19. Fundado en 1893 por Faustino Noriega y Fernando Etcheverry, desde 1931 lo regentaba la familia Elizalde. Hace bien poco, en 2011, obtuvo el premio al mejor restaurante clásico popular de Estados Unidos que concede la Fundación James Beard.
En las últimas décadas se han ido apagando poco a poco los hoteles vascos que sirvieron de soporte y apoyo a la inmigración vasca. Convertidos en restaurantes, el tipo de comida vasco-americana que se sirve atrae a mucha gente, hasta convertir eso que llaman acá Basque food o Basque family style en una marca o un sello singular de algunas zonas del Oeste. Al mismo tiempo, sin embargo, muchos de estos barrios con los establecimientos más antiguos han cambiado y se han degradado.
En el caso del Noriega el cierre por el coronavirus ha puesto la puntilla a una situación ya anteriormente delicada. El corazón y las retinas de muchos recordarán con agrado episodios familiares y sociales con que se han edificado vidas. No solo para varias generaciones de vascos americanos, también para los habitantes en general de Bakersfield y para muchos californianos, vascos y no. Hoy acá se lamenta el anuncio del cierre de Noriega
La prensa se ha hecho eco. El prestigioso diario Los Angeles Times califica el cierre como el fin de una era