Gral. Belgrano, Argentina. Desde su reactivación en 2017, el Centro Vasco de General Belgrano, provincia de Buenos Aires, ha mantenido una actividad constante, especialmente en las áreas de euskera y danzas, pero también en los festejos abiertos a la comunidad, como la celebración del Día de la Diáspora. Al ser un centro que retomó su actividad luego de casi tres décadas, las clases de idioma y bailes vascos estuvieron hasta hace muy poco tiempo a cargo de dos irakasles de Iparralde que se encontraban en la ciudad, Edurne Altune y Joana Ourthiague.
Este año 2021, y adaptados ya a la virtualidad consecuencia de las restricciones por la COVID-19, el Gure Etxea no solo continúa con las clases de idioma y bailes, sino que lo hace con irakasles propias. El euskera está a cargo de Natalia Urcola, socia de la casa y profesora en formación en Euskara Munduan, y las danzas de Bárbara Pérez Arrua, profesora de folclore y danza clásica.
Explica Sonia Etchelet, referente del Centro y ella misma alumna de euskera, que “Las clases son dos veces por semana; aprendemos mucho y también jugamos; hay un gran trabajo de la profesora, que incluye actividades recreativas a las tareas de estudio”. Destaca el buen ambiente en el grupo, que ha llegado a lo docena de estudiantes, y que se ve reflejado en el intercambio en las redes entre los participantes.
Con respecto a las danzas, Etchelet explica que debieron cancelar el proyecto de reunirse presencialmente, pero que están trabajando con la incorporación de los pasos básicos a través de videos: “La idea es que cuando finalmente podamos juntarnos, manejemos ya lo básico para empezar a bailar”.
“Esperamos que las reuniones sociales se pueden retomar pronto para volver a hacer festejos y avanzar en cosas pendientes, como la renovación de la Comisión Directiva”, refiere a EuskalKultura.eus la secretaria de la Euskal Etxea.
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