Arrecifes, Argentina. El pasado sábado 19 de febrero, el Centro Vasco Euskaldunak Denak Bat de Arrecifes cumplió 100 años. El acto institucional previsto se transformó en una fiesta por la cantidad de gente que se acercó y la alegría que inundó el encuentro. Representantes de un buen número de centros vascos, la Delegada del País Vasco en Argentina-Mercosur Sara Pagola, autoridades de FEVA, dantzaris, exdantzaris, socios y socias de la euskal etxea en general y la comunidad de Arrecifes estuvieron presentes para celebrar el centenario, duplicando el público esperado.
Exdantzaris del grupo Ugarritzak, tronco vital de la entidad, bailaron un emotivo aurresku, tocado y cantado en vivo por el grupo Maral, en la calle, frente a la fachada bellamente iluminada del baserri que es “La Vasca”, como muchos denominan cariñosamente al Centro Vasco. Hubo reconocimientos a exlehendakaris, a familiares de los fundadores y se compartió un brindis y una torta aniversario.
En adelante, en cada fiesta, Potxolo y Kuza
El broche final lo puso la presentación de los dos gigantes de la casa: Potxolo y Kuza, una sorpresa para todos. Se trata de un homenaje a Potxolo Loyola, txistulari que fue de la Casa y maestro de txistularis, y a Kuza Echaniz, gran representante de la euskal etxea. Después de varios meses de trabajo, y de ahora en adelante ambos estarán presentes en cada fiesta en forma de gigantes.
La idea, inspirada en las costumbres vascas, consensuada en comisión, fue llevada adelante por César Solanés Aurtenechea, y artistas locales: Luis Budnik, que realizó las cabezas y Francisco Bosco, que construyó la estructura. Resultó de gran ayuda en todo el proceso Iker Urruzola, alcalde de la localidad gipuzkoana de Zizurkil, en el País Vasco, que compartió su experiencia y hermanó los gigantes de ambas localidades.
Detrás de 100 años de trayectoria hay, sin duda, mucho trabajo en común, mucha vida compartida. Ya lo subrayaba Mariana Dominé Irigoyen: “tenemos el mejor nombre que podemos tener: 'Euskaldunak Denak Bat' y tenemos claro que es así: todos juntos o ninguno”. ¡Por muchos años más, Arrecifes, Zorionak!