Una vez más la Casa Vasca sanjuanina tomó sobre sí la responsabilidad de representar a Euskal Herria en la Fiesta Nacional del Sol, y este año lo hizo tanto en el stand gastronómico como en el escenario donde se presentaron los espectáculos de colectividades. Los integrantes de la euskal etxea se muestran satisfechos con la experiencia, que los anima a arrancar ‘con todo’ las actividades 2017.
San Juan, Argentina. La Fiesta Nacional del Sol que organiza cada año la provincia de San Juan es una de las fiestas populares más importantes de todo el país. Desde el 21 al 25 de febrero, la ciudad cuyana fue sede de una inmensa variedad de propuestas culturales, entre ellas ferias artesanales y gastronómicas, espectáculos artísticos de primera categoría y el tradicional carrusel.
Fiel al compromiso de cada año, el Eusko Etxea local volvió a decir ‘presente’, esta vez en el circuito de colectividades. Allí, en el txoko vasco, ofreció al público txistorra y variedad de pintxos, "todo casero", "elaborado por las damas de la institución". La comida, además, podía ser acompañada por txakolí fresco, oferta que se agradecía especialmente en jornadas con temperaturas cercanas a los 40ºC.
Junto a las damas de la Euskal Etxea, participaron en la atención del stand la secretaria institucional, Silvia Bene, y el Sr. Eduardo Ochoa junto a su esposa. En comunicación con EuskalKultura.com, la referente del Centro, Carina Oyola Álvarez, explicó la importancia de la presencia de Ochoa en el evento: “Eduardo Ochoa visitó un stand de nuestra Euskal Etxea en 2014 y allí encontró información sobre su apellido. Orientado por nosotros, luego pudo saber más sobre su bisabuelo, lugar de origen y cómo y cuándo llegó a la Argentina. Motivado por esto hace un tiempo se asoció a nuestra institución. La de su familia es una historia muy linda que Ofelia Larrea está escribiendo, junto con otras, con el objetivo de algún día publicar un libro sobre los vascos en San Juan”.
La participación de la Euskal Etxea en la Fiesta tuvo también su momento de música y color con los bailes de las dantzaris en el escenario de colectividades. Finalizada la fiesta y fnalizado prácticamente el mes de febrero, la Euskal Etxea se prepara para comenzar las actividades 2017. Este año continuarán las clases de euskera, las de danzas vascas, y el coro, “que tantas satisfacciones proporciona a la institución”, expresan desde el centro cuyano.