euskalkultura.eus

Vitoria-Gasteiz.  Según indica el departamento de Cultura en una nota, ell Viceconsejero de Cultura, Juventud y Deportes Gurutz Larrañaga inició ayer una visita de dos días a este prestigioso festival, donde este año el programa Kimuak, ya en su 11ª edición, tiene un stand en el que exhibe tanto los catálogos de ediciones anteriores como el de Kimuak 2008, cuyos cortometrajes llevan cosechados más de 40 premios en festivales de todo el mundo, entre ellos el de Alcalá de Henares, que como en años anteriores ha vuelto a reconocer la calidad de los cortos vascos concediendo un premio a cada uno de los cuatro cortos de Kimuak que habían sido seleccionados en su competición.

Así, El tiempo prestado, de David González, se ha alzado con el Premio Ciudad de Alcalá, el más importante de los concedidos en el Festival, mientras que Berbaoc se ha hecho con el de mejor sonido (Xabier Erkizia), On the Line ha obtenido el correspondiente al mejor montaje (Raúl López) y la protagonista de Yo sólo miro, Susi Sánchez, ha sido elegida como mejor actriz. Con los premios otorgados este año, los cortos de Kimuak han obtenido el premio principal de este festival durante tres años seguidos, tras las victorias en 2006 de For(r)est in the des(s)ert (Luis Alejandro Berdejo) y en 2007 de Traumalogía (Daniel Sánchez Arévalo).

8 cortos en Kimuak 2008

Ocho son los cortos seleccionados para formar parte de este nuevo catálogo de promoción del corto vasco, con un predominio claro en esta ocasión de cortos de producción guipuzcoana: 7 de los cortos proceden del territorio de Gipuzkoa, mientras que el octavo ha llegado desde Bizkaia. Kimuak 2008 intenta mantener la línea marcada por las anteriores selecciones, pero hay algunos hechos significativos que marcan algunas diferencias con ellas.

 Una de las características del catálogo de Kimuak 2008 es que por primera vez aparecen unidos en el catálogo los tres grandes géneros: ficción, animación y documental, e incluso hay también una muestra de un cuarto género híbrido, el falso documental.

En segundo lugar, por primera vez en la historia del programa dos directores duplican su presencia en el mismo catálogo, los donostiarras Jon Garaño y Raúl López. Salvo los nombres de David González, presente en la edición de 2006, y de Izibene Oñederra, seleccionada en 2007, el resto de los nombres de Kimuak 2008 no han formado parte de ninguna de las anteriores ediciones, lo que hace pensar que la renovación está en buena medida garantizada.

En cuanto a los géneros, el predominio es para el fantástico y el drama, así como el documental en sus dos vertientes: la tradicional y el falso documental; también hay hueco para la animación experimental e incluso para alguna referencia literaria.

El corto que abre el catálogo es el documental Asämara, rodado en Etiopía por Jon Garaño y producido por Moriarti Produkzioak. La palabra que da título al corto es una palabra etíope que quiere decir “mandar a trabajar”, y se trata de una mirada nada violenta pero tampoco complaciente ni conmiserativa sobre el trabajo infantil en África. Le sigue Autorretrato, dirigido por Javi Alonso y Raúl López y producido por la empresa hernaniarra La Burla Producciones, un opresivo drama protagonizado por dos únicos personajes femeninos enfrentados.

El tercer cortometraje es una animación colectiva, realizada en Arteleku durante un taller de animación coordinado por el artista croata Vuk Jevremovic y en el que también ha tomado parte la donostiarra Isabel Herguera; se trata del corto Berbaoc, firmado por los animadores José Belmonte, Gustavo Díaz, Irati Fernández, Izibene Oñederra y Mercedes Sánchez-Agustino, y es una experimentación libre a partir de una pieza sonora de Xabier Erkizia.

El cuarto corto es Cotton Candy, dirigido por el donostiarra Aritz Moreno y producido por la también donostiarra Pok Produkzioak,  está inspirado libremente en el cuento de Julio Cortázar No se culpe a nadie; en él, Aritz consigue trasladar la sensación de sinsentido e irrealidad terriblemente real del cuento del escritor argentino. El siguiente cortometraje es el falso documental On the line, firmado de nuevo por Garaño y Moriarti, en el que el escenario natural de Las Bardenas Reales se convierte en la frontera entre Estados Unidos y México, donde algunos voluntarios armados vigilan el paso de los “espaldas mojadas” a territorio norteamericano.

La representación vizcaína viene de la mano de David González, director y productor de El tiempo prestado, un corto en el que una cámara inmóvil es testigo de un drama familiar que mezcla los problemas de la tercera edad con los del acceso a la vivienda. Raúl López y el también guipuzcoano Gregorio Muro (ambos como codirectores y coproductores) firman el thriller fantástico Tras los visillos, un relato que mezcla un asesino en serie con un cirujano venal, una vieja fisgona, un soplón asustado y un sicario corto de luces, en una historia oscura, de alta tensión e incluso con algunas gotas de gore. Cierra el catálogo el cortometraje Yo sólo miro, obra del donostiarra Gorka Cornejo, producida por el también donostiarra Koldo Zuazua, una sombría mirada sobre los secretos no confesados de un matrimonio de edad madura, obra que recientemente ha obtenido ya algunos reconocimientos en festivales, entre ellos un premio en el Festival Internacional de Cine de Elche.