Kalteak handiak izan badira ere, instalazioak berriz ere eraikitzeko borondate sendoa dago, lehenbailehen erabili ahal izan daitezen (argazkia JIT-Invasor)
El gravísimo embate del huracán Irma dejó en el Caribe un rastro de destrucción que llevará tiempo reparar. No tenemos noticias de que los integrantes de la colectividad vasca hayan sufrido daños personales, aunque sí nos llega información e imágenes sobre instalaciones deportivas como los frontones en Ciego de Ávila, en los que se celebra cada año la Copa Nacional Mártires de Bolivia, que sí han resultado gravemente afectados.
Ciego de Ávila, Cuba. De hecho, las labores de desescombro y limpieza de lo que antaño fueron los frontones de pelota vasca se han iniciado ya. Se confirma que las instalaciones deportivas han quedado inservibles y se apuntan los siguientes pasos a dar. Según señala Leonardo Rodríguez Sánchez, director de Deportes en la provincia avileña, «Irma derribó las canchas, cuyos muros medían 20 y 30 metros de largo por siete y nueve metros de alto, por lo que la edificación comenzará desde la base», reveló Rodríguez Sánchez a JIT, órgano informativo del INDER, Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación,
«Aunque falta el acero por inexistencia en el territorio, ya se dispone de más de tres mil bloques, una cantidad considerable de áridos y cemento, lo cual avala la voluntad de rescatar el local, que acoge la realización de los juegos escolares y juveniles de la disciplina y por años ha sido formadora de atletas», dijo el directivo.
«También solicitamos la contribución de entidades de la construcción porque son las que cuentan con equipos de izaje y otros andamios muy necesarios para las labores de altura», señaló. El fenómeno hidrometeorológico provocó estragos en 63 instalaciones del deporte en Ciego de Ávila, fundamentalmente la pérdida completa de techos de zinc y de tejas de fibrocemento, desprendimiento de la carpintería y del manto impermeabilizante en aquellas con cubiertas sólidas, informa JIT.