Tandil, Argentina. El Taller de Danzas dictado por los integrantes de Ekin Kultur Taldea fue el 9 de junio en las instalaciones del Gure Etxea. Allí se convocaron unos treinta jóvenes de los centros Hiru Erreka, de Tres Arroyos; Lagunen Etxea, de Laprida; Aberri Etxea, de Viedma-Patagones y los locales del Gure Txokoa.
El encuentro se dividió en dos partes y abordó contenidos de los territorios históricos de Zuberoa, Bizkaia y Gipuzkoa. Por la mañana, entre las 10 y las 13:30hs los dantzaris comenzaron con un calentamiento integral y postural, y con las danzas zuberotarras ‘Maskarada Gorria’ y ‘Maskarada Beltza’. Según informa el propio Aitor Alava a EuskalKultura.com, “se dispuso un camino pedagógico para que tan importante y complejo contenido sea más fácil de abordar y así obtener resultados más satisfactorios. Tuvieron un papel protagónico algunos pasos técnicos, como es el caso de la Antrexata”.
Por la tarde, se comenzó con ‘Mazurka’ y con un par de danzas guipuzcoanas, como ‘Agurra’ y ‘Belauntxingo’, “que permitieron a los presentes remontarse a los tiempos de Iztueta”, explica Alava. Entre las danzas grupales de pabellón, se ensayó la vizcaína ‘Ezpata Dantza’ de Xemein y el monitor recordó la historia y su devenir en coreografía. Alava también respondió dudas de los asistentes sobre cómo mejorar los pasos de baile conocidos como Murixkak, cómo solventar los problemas de giro en el eje, y se compartieron sugerencias en relación a cómo presentar los proyectos para el Gaztemundu 2018.
Finalizado el Taller, los anfitriones ofrecieron una cena en la que los dantzaris pudieron mostrar lo practicado en la jornada. La velada arrancó con un Aurresku conjunto. El cuerpo de baile local interpretó ‘Lizartzako Makil dantza’, ‘Txulalai’, ‘Agintariena’, ‘Txotxongilo’, ‘Txapeloaz’, ‘Makil dantza’, ‘Fandango’ y ‘Arin Arin’, y finalmente, todos los presentes se reunieron en la pista y se animaron con ritmos locales como gato, chacarera, chamamé y zamba.
“Fue una excelente jornada, de la que esperamos que los dantzaris participantes se nutran también a posteriori y por eso les dejamos material, un cuadernillo con soporte teórico y un cd con la música”, agrega el responsable del Ekin Kultur Taldea, para cncluir diciendo que “por todo lo vivido queremos expresar nuestro agradecimiento al centro Gure Etxea de Tandil, por su confianza, antes, durante y ahora. No es cuestión de aburrir, pero todo nuestro patrimonio sigue secuestrado y de vez en cuando es bueno recordarlo”, insiste Alava, haciendo referencia al conflicto que aun sostiene la agrupación con Eusko Kultur Etxea.
Más fotos, aquí.