Unai Elorriaga y Unai San Martin reciben los Premios Nacionales de Literatura y Grabado 2002

El escritor Unai Elorriaga y el fotógrafo y grabador Unai San Martin, se han hecho acreedores del Premio Nacional de Literatura y el Premio Nacional de Grabado de España en su edición de 2002

El escritor Unai Elorriaga (Bilbao, 1973), con la novela SPrako tranbia (El tranvía para SP), se ha hecho acreedor del Premio Nacional de Literatura español, en su edición de 2002, mientras el Premio Nacional de Grabado ha recaido, por su parte, en el fotógrafo y grabador Unai San Martin (Eibar, 1964), por su obra Figura.

Publicada la pasada primavera por la editorial donostiarra Elkar, SPrako tranbia es la primera novela del bilbaino Unai Elorriaga, un joven escritor que al día de hoy se halla corrigiendo las pruebas de su segunda novela, Hilerriak eta Hiztegiak (Cementerios y Diccionarios). El protagonista de SPrako tranbia es Lucas, un anciano de 93 años cuya memoria entremezcla imaginación y recuerdos. Lucas sale del hospital donde ha pasado una larga temporada para volver a su casa en compañía de su hermana María, pero se encuentra con que un músico callejero okupa, Marcos, se ha instalado allí. Lucas y su hermana deciden no expulsarlo e integrarlo en su vida, mientras Lucas va perdiendo la lucidez de una manera podría decirse que simpática. La SP del título de la novela hace referencia a una cumbre asiática, el Shisha Pagma (SP), cumbre que Lucas visita en su memoria.

Además del prestigio y de la publicidad que se hace a la obra premiada, el Premio Nacional de Literatura lleva consigo un aporte conómico de 15.025 euros. Hasta la fecha, sólo Bernardo Atxaga, con Obabakoak (1989), había logrado este galardón que convoca anualmente el Ministerio español de Educación y Cultura.

Por su parte, el Premio Nacional de Grabado ha reconocido en esta edición a Unai San Martin, por su obra Figura, en la que el artista vasco usa el heliograbado, la tinta de agua y el collage. Nacido en Eibar en 1964 y residente por años en Hondarribia, San Martin reside en la actualidad en los alrededores de la ciudad californiana de San Francisco, donde continúa la investigación y práctica de técnicas como el propio heliograbado, y experimenta las posibilidades que las nuevas tecnologías incorporan al arte.

Unai San Martin es un grabador autodidacta. Fotógrafo y artista gráfico, en 1991 recibió el premio Gure Artea y se halla asimismo en posesión de una mención de honor en el Premio Nacional de Calcografía (2001). Ha recibido entre otras becas, la norteamericana del Kala Art Institut de Berkeley (1997), de la Fundación Miró (1998) y de la Diputación Foral de Gipuzkoa (1998). Además de en el propio País Vasco, ha expuesto entre otros lugares en Eslovenia, Alemania, Estados Unidos y España. Han adquirido obras suyas instituciones y centros culturales como el Museo de Arte Reina Sofía, el Gobierno Vasco, la Biblioteca Nacional española, el Museo del Grabado de Marbella, la Diputación Foral de Gipuzkoa y Centro Koldo Mitxelena, y la Universidad de Deusto. El Premio Nacional de Grabado, al que concurrían ciento cincuenta obras, está dotado con 12.000 euros y le será entregado el próximo 19 de diciembre en la Academia de Bellas Artes de San Fernando.

Junto a San Martin, ha sido también premiado en el campo de las artes gráficas el reconocido artista Antoni Tapies; la institución Museum in progress de Viena ha obtenido una mención de honor, así como la madrileña Galería Estiarte. Otras menciones honoríficas han recaido en la artista norteamericana Anne Heywaerte, la argentina Laura Lio y la gallega Ana Matos.

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