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Santiago, Chile. Las diversas fuentes vascas consultadas por EuskalKultura.com en Santiago y zona metropolitana, en Viña-Valparaíso, y en la Octava región, donde se sitúan Concepción y Constitución, no han señalado ningúna persona de la colectividad vasca fallecida, si bien sobre todo en esta última zona, en la Región del Bio-Bio, las comunicaciones siguen resultando realmente dificultosas y los datos son del todo provisionales.

En la Quinta Región, el presidente de Eusko Etxea de Viña-Valparaíso, Archibaldo Uriarte, informa de que no tiene constancia de bajas en la colectividad vasca. Por el contrario, en el apartado de daños materiales, la sede de Eusko Etxea de la Quinta Región sí se habría visto muy afectada y sus muros y estructuras destruidos o dañados en un alto porcentaje. La dependencia vasca se halla situada en la octava planta de un edificio "que ya no ofrece seguridad". "Hemos perdido nuestra sede social", señala Uriarte.

Desde Santiago, Ignacio Bastarrica y María Anjélica Carrasco, responsables del boletín vasco 'Berriketari', aportan un testimonio que se repite en la mayor parte de las fuentes consultadas: "En el caso nuestro todo está bien, nuestras familias y nuestras viviendas soportaron bien el terremoto, sólo quebrazón de cosas y enseres perdidos. En realidad fue una madrugada horrorosa y afortunadamente la población dormía. Seguramente eso ayudó a que las consecuencias fueran menores. Así y todo son cientos de miles los damnificados y hasta el momento la cifra de fallecidos se eleva hasta casi los ochocientos, y seguramente seguirá aumentando en la medida que vaya transcurriendo el tiempo. Hay zonas de nuestro país totalmente destruídas por acción del sismo y también por los tsunamis que arrasaron los bordes costeros".

Continúan explicando que "hasta el momento no hemos sabido de damnificados entre los Vascos residentes en nuestro país y esperamos que todos estén bien. Ha sido lento el proceso de normalización, especialmente en el terreno de las comunicaciones. La falta de electricidad, agua, gas y teléfonos en varias zonas de Chile dificultan conocer con mayor exactitud lo ocurrido. La angustia y desolación en las regiones más afectadas incluyendo a Santiago ha provocado saqueos y actos delictivos que solamente agravan la situación. Las autoridades han decretado toque de queda en Concepción para evitar éstos vergonzosos actos".

"La histeria colectiva provoca atochamientos en las bencineras y colas interminables en Supermercados con el ánimo de sobreestockearse de alimentos y otros elementos que no ayudan en absoluto en la tarea de orden y normalización. Más de 2 minutos de violentos sismos fueron interminables para todos nosotros, tal vez sea una de los más grandes recibidos en éste país acostumbrado ya a los terribles efectos destructivos. La solidaridad internacional es grande e importante para nosotros, así como los miles de mensajes recibidos por internet, medio que hasta el momento ha sido el más efectivo para comunicarse".

Por su parte, el erratzuarra Agustín Otondo Dufurrena, ex-presidente y miembro fundador del Centro Navarro de Chile nos ha manifestado, junto a otros medios, que él y su familia se encuentran bien. "Lamentablemente es muy poca la información que tenemos, ya que en muchos lugares de Santiago no tienen luz, agua y tampoco funcionan los teléfonos y al sur de esta capital, la situación es mucho peor. Fue horroroso el terremoto".

Algo semejante expresa de modo telegráfico Patricio Legarraga, descendiente asimismo de baztaneses: "La destruccion en el sur de Chile es enorme. En la zona de Concepción no hay electricidad ni agua. Miles de casas destruidas. Es muy dificil comunicarse. Hay cientos de muertos y desaparecidos por el terremoto y sobre todo por los tsunamis. En Valparaíso hay problemas de electricidad y agua. En Santiago la situacion es mas tranquila. Sobre todo mucho susto. En mi familia todos bien gracias a Dios. La casa no tiene daños. Estamos sin electricidad. ¡Nos golpeó muy fuerte este terremoto!".

También desde la capital, Francisco Montory, descendiente de labortanos, manifiesta hallarse bien, junto a su familia. "Aquí en Santiago se cayeron algunos pasos sobre nivel y pasos peatonales elevados en carreteras urbanas o interurbanas, el sector antiguo de Santiago quedó bastante dañado, ya que hay casa muy antiguas de adobe, aunque tambien se dañaron algunos edificio modernos".

"A modo de consuelo, los chilenos estamos acostumbrados (desde el día en que llegaron los primeros conquistadores españoles con Diego de Almagro y Pedro de Valdivia, y varios vascos que conformaban sus huestes) a que periódicamente suframos terremotos y maremotos a lo largo de nuestro territorio. Sufrimos, nos levantamos, reconstruímos, seguimos creciendo y... esperando el próximo terremoto". "Pero éste fue bien grande y dañino".

Afirma Montory que "las extremas violencias periódicas de terremotos y maremotos nos ha hecho a los chilenos comprender la fragilidad humana, acordarnos de Dios, hacernos un pueblo humilde y a su vez emprendedores frente a la adversidad..., además de quejarnos del Gobierno (lo cual además es un acto terapeutico y de relajación). Obviamente que las gotas de sangre euskalduna que corre por la venas de la gran mayoría de nosotros han contribuido a conformar nuestro caracter resistente y resiliente. El nuevo Presidente Sebastián Piñera Echenique tiene sangre vasca".