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Nueva York, EEUU. La Euzko Etxea de Nueva York será el escenario de una charla sobre el Agirre Lehendakaria Center, en la que los responsables de este proyecto informarán sobre las últimas actividades y estudios del centro. Entre ellos estará Amaia Agirre, miembro del equipo de trabajo del centro y una de sus impulsoras, además de nieta del lehendakari José Antonio Agirre, cuya figura ha inspirado el proyecto.

"Nuestra familia siempre ha tenido relación con esta ciudad y, sobre todo, con la Diáspora", ha explicado Amaia a EuskalKultura.com. "Hay que tener en cuenta que gran parte de la familia Agirre tuvo que salir de Euskal Herria en aquella época, por lo que saben lo que es vivir en el exilio. Aunque hoy en día la situación es otra, y nuestra generación no se ha visto obligada a vivir fuera, como dice el Lehendakari Ibarretxe, la cadena no se ha roto".

El Caso Vasco

Juan José Ibarretxe es, precisamente, uno de los impulsores principales del proyecto. En los últimos años ejerció como profesor e investigador en Columbia University y la George Mason de Washington, y fruto de ese trabajo se publicó en 2012 el estudio “The Basque Case: A Comprehensive Model for Sustainable Human Development” (El Caso Vasco: Un modelo completo para el Desarrollo Humano Sostenible).

"Interesados en dar continuidad a este proyecto, estos centros firmaron un acuerdo de colaboración para crear un programa de investigación permanente, el “Lehendakari Agirre Program”. E invitaron a sumarse al mismo a la Universidad del Pais Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea", ha explicado Amaia. Fruto de este intercambio y colaboración internacional nació el Agirre Lehendakaria Center (www.agirrecenter.com), que se presentó oficialmente el pasado mes de marzo.

Transformación social 

Para poder explicar mejor el campo de trabajo del ALC, Amaia Agirre lo sitúa en el contexto de la historia reciente de Euskal Herria: "Al final de la década de los 70 Euskadi salía de una dictadura de 40 años, en la que se reprimió cualquier muestra de la cultura vasca. En aquel momento, Euskadi vivía una dura crisis económica, con una tasa de paro del 30%; además, su imagen internacional estaba relacionada directamente con la violencia terrorista. En esas circunstancias, Euskadi logró transformar su economía de un modo solidario y estar entre los líderes mundiales en salud, educación y renta per cápita. Hoy en día, las empresas vascas tiene gran presencia internacional y la cultura vasca está unida a la modernidad".

El objetivo del ALC es, según cuenta Agirre, estudiar y dar a conocer las decisiones estratégicas que hicieron posible esa transformación y compartirlas con otros países del mundo que buscan responder a retos parecidos de una manera innovadora. "A la Universidad de Columbia le han interesado mucho dos cosas: por un lado, el estudio de los logros de estos 40 años; y, por otro, el hecho de que eso se haya logrado habiendo violencia terrorista de por medio. En una situación así lo más normal es que ese país retroceda, pero nosotros hemos hecho justo lo contrario,", reflexiona Agirre.

Vínculo emocional

Amaia Agirre, con formación acádemica en Resolución de Conflictos, reconoce que para ella este proyecto tiene un vínculo más allá de lo profesional: "El Lehendakari Agirre era mi abuelo y me gustaría poner de actualidad de nuevo algunos de los valores que él defendió. Sobre todo uno: él fue capaz de unir de algún modo a todos los vascos, a pesar de tener ideas diferentes, y eso es lo que echo de menos terriblemente hoy en día".

Los adelantos logrados en Euskal Herria han sido grandes, y Agirre ve al ALC como una herramienta para seguir por ese camino. "Hasta ahora hemos hecho las cosas bien, pero eso no quiere decir que debamos actuar con vanidad; al contrario, debemos seguir trabajando, porque todavía nos queda mucho por aprender y mejorar. Además, entramos en una época bonita, sin violencia, y no deberíamos desaprovechar este momento. Teniendo en cuenta la situación actual de crisis, para mí este proyecto mira al futuro y hace confluir varios elemenrtos para enfrentarse a él con ganas. Es un proyecto ilusionante", concluye.