El 22 de mayo resultó un día inolvidable para Amanda (izda) y Cirbie (drcha). La sonrisa en los labios y los ojos brillantes duraron todo el día después de que Cirbie le pidiera matrimonio a Amanda, para sorpresa de esta, que a pesar de lo inesperado no dudó en responder con un ilusionado sí a la propuesta (foto Marc Gaztambide-UEE)