"Para que haya un Alegre Despertar primero tiene que haber ese despertar, y en nuestro caso no lo hubo!" recuerda entre risas Xabier Maritxalar. A pesar de que el tiempo no acompañó, "anduvimos cantando de casa en casa, como en las fiestas de cualquier pueblo pequeño de Euskal Herria, fenomenal!", añade Xabi Urtasun (foto Necochea CV)