Terminada la exposición, la Euskal Etxea ofreció un agasajo en honor a la visitante. La convocatoria fue amplia y tanto socios del Centro como representantes de otras colectividades participaron de la reunión. En el marco de la cena, Pagola pudo disfrutar de las canciones en euskera que ofreció el coro y de las danzas de los txikis, niños, adolescentes y adultos (foto EE)