Una delegación compuesta por nueve jugadoras de categoría cadete del Indie Chicas, el único club exclusivamente femenino de Idaho, ha estado durante una semana en Euskal Herria. Se han alojado en las casas de las cadetes del Athletic Club, pudiendo palpar el día a día rojiblanco desde dentro, en el marco de un plan de viaje repleto de actividades relacionadas con el euskera, la cultura vasca y el Athletic.
Junto a los entrenamientos y partidos que disputados junto al Cadete del Athletic en Lezama, las nueve jugadoras del Indie Chicas han tenido la oportunidad de practicar Herri Kirolak, asistir a talleres para aprender euskera y conocer, entre otros lugares de interés, AC Museoa y Euskararen Etxea en Bilbao, la playa de Laida y la iglesia de San Miguel –desde donde podrán apreciar toda la reserva de Urdaibai o la feria de Gernika.
Además, hansido recibidas por toda la plantilla del primer equipo femenino del Athletic Club y han tenido la posibilidad de departir con referentes de la entidad como Jose Angel Iribar, Iraia Iturregi (quien, además de visitar Boise en 2014, jugó en el Florida State University de USA en 2006/07) o Garazi Murua. La getxoztarra, que jugó un semestre en el fútbol universitario de Estados Unidos en 2014 con la East Tennessee State University, les habló de su experiencia en la elite del fútbol y de su paso por el Athletic Club.
Los lazos entre el Athletic Club e Idaho, a través de la comunidad vasca residente principalmente en la capital, Boise, no han parado de crecer durante la última década. Desde que una delegación del Athletic Club, compuesta por Iraia Iturregi, Erika Váquez y Ainhoa Tirapu, visitara Idaho y participara en un campus en 2014, se han sucedido diferentes iniciativas de hermanamiento vasco. La más importante, el partido que el primer equipo masculino disputó en el Albertsons Stadium de la Boise State University frente al Club Tijuana Xoloitzuintles, en julio de 2015.
Un partido de pretemporada que coincidió con la célebre Jaialdia, fiesta de la colectividad vasca que se celebra en Boise cada cinco años, y que contó con la participación de una nutrida representación rojiblanca. Durante la estancia, los jugadores del primer equipo masculino del Athletic Club visitaron la Ikastola de Boise y la Euskal Etxea, además de ser agasajados desde el mismo aeropuerto por la comunidad vasca residente en Idaho y Nevada. Una de las impulsoras del “Basque soccer friendly” fue Argia Beristain, activa integrante de la diáspora vasca en Estados Unidos, que también ha formado parte de la delegación del equipo Indie Chicas, ya que su hija Izar es una de las componentes de la escuadra de Boise. Tanto ella como Johana Ruiz-Olabuenaga, directora de la Gran Área Social de la entidad, han explicado los objetivos de la visita al corazón del Athletic.