Le ha costado al lehendakari López pero, como señalamos en nuestra sección de noticias, por fin este martes el Gobierno Vasco ha designado al nuevo responsable de Relaciones con las Colectividades Vascas en el Exterior. El nombramiento, de hecho, no será efectivo hasta su publicación en el Boletín Oficial del País Vasco, cosa que se producirá seguramente este próximo viernes, 10 de julio. Con ello queda cubierta la vacante existente desde el cese del anterior director, Josu Legarreta.
No conocemos aún a Julián Celaya Loyola, pero a buen seguro lo haremos en breve. Por de pronto, quienes serán los primeros de toda la Diáspora en conocerlo serán presumiblemente los participantes en la edición 2009 de Gaztemundu, que llegan este domingo a Vitoria-Gasteiz una vez superados los problemas suscitados concretamente en Argentina con la atribución provisional y definitiva de plazas, que tanta correspondencia virtual y tanto eco ha generado en algunos foros de internet.
Como decíamos en una entrega anterior, el puesto de Director/a de Relaciones con las Colectividades Vascas no es, a nuestro juicio, uno más de los del entramado del gobierno. El mundo de la Diáspora es un mundo con características propias, constituido por voluntarios, gente no remunerada que trabaja, y en muchos casos duro, y lo hace ad honorem, por el convencimiento de que con su labor aporta a la sociedad del país y la comunidad del mundo en la que vive --que las más de las veces es además su país natal--, así como al país, la cultura o la identidad de sus ascendientes, hecha suya en uno u otro grado, con mayor o menor intensidad.
Ello no implica patentes de corso para nadie. Corresponde al Gobierno fijar las líneas políticas y las prioridades en relación a su acción respecto a la Diáspora y establecer las relaciones de cooperación y apoyo necesarias para el mantenimiento y el buen funcionamiento de las sinergias en el quehacer común de preservar la buena marcha de las aportaciones que desde diversos lugares del mundo se realizan al universo común de lo vasco y la cultura vasca. Es su derecho y su responsabilidad.
Deseamos suerte al nuevo director. El suyo es un puesto paradiplomático, en el que hace falta querer y ser capaz de valorar, motivar, reconocer, apoyar y alentar; que precisa de un don de gentes, así como de ser capaz de constituirse en el primer voluntario. Y a partir de ahí, trabajar. Empiezan a correr los cien días de gracia.
En otro orden de cosas, señalar que hoy es festivo o feriado en Argentina --9 de Julio, día patrio--, a pesar de lo cual poco a poco nos han ido llegando las notas correspondientes a la suspensión de los actos de San Fermín y patrios programados en diversos centros, desde la propia Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con actos del Centro Navarro de Buenos Aires, Casa de la Cultura Vasca hasta Euzko Etxea de La Plata, capital de la provincia bonaerense.